Vivir de las sobras de tus miradas,
mendigar una sonrisa espontánea,
añorar el roce de tus dedos,
implorar tu cercanía a gritos…
Todo esto y más haría
para regresar al principio,
para volver a ser tu centro,
ser tu sueño, ser tu vida…
Rogar con ojos enllantados,
clamar clemencia a Dios,
rehacer el mundo de los dos,
rescatar el pasado del mar del olvido…
Todo esto y más haría
para estar donde estuvimos,
para unificar nuestras vidas,
y ser tu futuro, ser tu destino.
Francisco de Sales