No viene a visitarme

Llaman a mi puerta recuerdos escapados del olvido. Llegan sangrando. Tanto dolor acumulo que mi llanto es ácido. La pena y yo somos lo mismo, indisolubles. nos intercambiamos el nombre. La tristeza me envidia: soy más triste que ella. Mis…

Sin comentarios

Hoy tampoco puedo

Hoy tampoco puedo recomponerme, colocarme bien la sonrisa, ni mirarme al espejo sin ver una lágrima reflejada, ni mantener viva la esperanza aunque sea artificialmente. Hoy tampoco puedo reconciliarme con mi ánimo, ni espantar la tristeza, ni darme besos o…

Sin comentarios

Mis sábanas sin ti

“Mis sábanas añoran tu desnudez, tu revolución, tu sudor”. Esto piensa mi alma desalmada en esta cama sin ti. Hace tiempo alborotábamos las sábanas, nos deshacíamos de la ropa, desoíamos el pudor, nos permitíamos entrar en la vorágine de dejar…

Sin comentarios

El amor propio

Se siguen repitiendo las voces dentro de mí. Son las mismas de siempre. Los gritos se intercalan entre las lágrimas y los silencios están ocupados por desgarros. No puedo escapar. Entran, irrespetuosos -haciendo que me arrodille- los lamentos inagotables, los…

Sin comentarios

Revoloteo, revolotear

Hay un revuelo de aire inquieto, un revoloteo de cabelleras, un baile de sábanas colgadas, un remolino de hojas secas. Hay una corriente que levanta faldas, que enloquece a las veletas, vuelve locos a los pájaros y descoloca a los…

Sin comentarios

No ser

No ser -porque realmente no soy- parece una exaltación del pesimismo, la voz de mi inutilidad, o un lamento reivindicativo. No ser -porque realmente nunca he sido- es mi tragedia, el dolor con el que convivo, lo que me ata…

Sin comentarios

Nada quiero de ti

Te marchaste. Te llevaste una parte de mí. Me dejaste toda la tristeza. Al deshacer la pareja llegó el momento de los repartos. Repartimos aquellos recuerdos en los que aparecíamos los dos. Repartimos los besos y me quedé con los…

Sin comentarios