Asuntos internos

Solvento

a tropezones

mis asuntos internos.

No entiendo de corazón y sensibilidades.

Sólo de tropezar una vez y otra,

de no escarmentar o aprender,

de no abrirme y no vivir en calma.

Así transito por la vida:

esquivado por la fortuna,

proscrito por la felicidad,

repudiado por lo bueno.

Sufrir es mi verbo más usado,

llorar el más indeseado,

vivir el más difícil.

Solvento

con desgana

mis asuntos internos.

Francisco de Sales

Deja una respuesta