Tus pasos

Quizás nunca te hayas dado cuenta de cómo te lleva tu cuerpo por la calle. Va lento. No coge la velocidad de tu pensamiento. Se adecúa al ritmo de tus años, muchos, y de tu vida cansada. Tu cuerpo se…

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Tus ojos

Tus ojos cubitos de hielo se derriten se deshielan lloran lágrimas frías de dolor frío como el corazón frío que no encuentra abrigo. Tus ojos esponjas llenas de llanto como nubes con panza de llanto como plañideras de fácil llanto…

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Tu espalda

Me emociona el pensamiento el recuerdo de tu larga espalda desnuda oculta a trozos, indiscriminadamente, por tu extenso pelo encaracolado. Me estremece. Me provoca un escalofrío agradable, un conato de lágrima nostálgica y una punzada de lágrima triste que me…

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Silencio

Me asomo con sorpresa al mundo de tus latidos; más allá de cada pulso sólo existe una nota, muda y repetitiva, que pasa inadvertida: es el silencio. Escucho tu ritmo: latido, silencio, latido... Deseo que no se subleve un silencio…

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Sabe bien tu piel

Sabe bien tu piel. Le quedan rastros invisibles de muchos besos, los surcos apacibles de anteriores caricias, un toque efímero de canela y también el paso continuo del cielo. Sabe a silencios y abrazos, a mar cuando el mar es…

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Reorganización

Tranquilo. Recoge la luz del suelo y vuelve a ponerla en la luna. No te pongas nervioso. Recoge las estrellas del suelo y colócalas en el cielo. Cálmate. Recoge los planetas del suelo y ponlos otra vez en el cielo.…

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Paseos de las caricias

Paseaba sus caricias por el cuerpo adorado de su amada. Al final de sus dedos estallaba una feria de fuegos artificiales por el solo roce con la piel. Volvían las caricias emocionadas, deshechas en un agradable llanto, tan felices como…

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