Sol rompiente

Repentinamente,

como naciendo de improviso,

el sol encuentra un hueco entre las nubes

y se asoma al mundo

que le recibe alborozado.

Entre las nubes enojadas

se cuela una luz de esperanza.

El chorro de luz

alumbra y deslumbra a un tiempo.

El contraste con la tormenta

es favorable para el sol.

Tanto,

que despierta la envidia de las nubes

y vuelven a apretarse,

aún más enojadas,

para que no pueda pasar.

Francisco de Sales

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