Prevención

No existe el fin. La palabra final queda desterrada. Muerte no existe en mi boca. Borré nunca de mi diccionario. Luz, en cambio, la he remarcado. Tengo alegría repetida varias veces. Felicidad es mi meta. Esperanza, mi vida. Ya no quiero más lamentarme en cada respiración, sufrir en cada…

Sin comentarios

Otra protesta nueva

A veces,                   me gustaría                     no tener que aguantarme                       a todas horas,                 no encontrarme en todos los sitios,               no sentir mi mente crítica,                     inquisidora,                      juzgándome siempre,                      riñéndome casi siempre.                  A veces,                 …

Sin comentarios

Ofrecimiento

A cambio de otro presente menos doliente ofrezco mi alma apenas usada a quien acepte el trato. Que cualquier Dios o Diablo interesado se presente ante mí que negociaremos. P.D.- abstenerse bienintencionados, salvavidas, religiosos, y vendedores ambulantes. Francisco de Sales

Sin comentarios

Obscuro aciago

No sé dónde tengo el alma, pero sé cuánto pesa. Se refleja en todo lo que escribo, tan fúnebre y tan pesado, tan serio y tan desalmado. Desde dentro de mí se expresa un ser atormentado, de horizontes cercenados, de…

Sin comentarios

No pensar

Es mejor no pensar. Dejar que las divagaciones me invadan, se decostruyan las ideas, nada permanezca en el pensamiento y ser presa de un no sé qué. Mejor no perseguir un reinado, ni alterar el cerebro con grandezas, ni buscar…

Sin comentarios

No me oiste

Anoche te llamé. Con el pensamiento. No quise coger el móvil para preguntarte ¿estás viendo cómo llueve? Preferí concentrarme y visualizarte junto a la ventana: el camisón transparentando tu desnudez, los brazos cruzados y pensando en mí. ¿Estás viendo cómo…

Sin comentarios

No deseo

Si mi pensamiento tuviera el poder de dar cuerpo y vidaCuando escucho el dolor ajeno, las infancias maltrechas, los corazones no correspondidos, los ancianos desatendidos, siento una pena de fuego y una rabia inaplacable. Son las tripas de mi corazón…

Sin comentarios