Un mal día

Tengo los pies fríos.

También noto la respiración quieta,

los dedos agarrotados,

y el corazón callado.

La cabeza sí me funciona.

Se alternan en sus dominios

contradicciones y recuerdos,

pasado y sueños,

realidad y dudas.

Posiblemente esté muerto.

Lo sabré más adelante:

cuando vea que nunca me levanto,

que ya nadie me habla

o que los gusanos me invaden.

Ese día,

será un mal día.

Francisco de Sales

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