mi última voluntad – dijo a su esposo- es que me entierren viva.
(García Márquez)
…y llegar al Cielo antes de morir
ver a Dios sus barbas de algodón
confraternizar con los angelitos
besar la mano a la Virgen
insultar a Judas
bueno a este no que estará en el infierno
también quisiera conocer a mis tataranietos
aunque yo no haya parido hijos
que el destino no me los dio
pero es mi otra última voluntad
verlos corretear gatear trastear…
así como también quiero que me acompañes tú
mi vida mi amor
mi incondicional mi cálido esposo
el hombre que superó a mis sueños
quien me ha procurado tantos días de felicidad
y no es por el egoísmo de no ir sola
que ya sabes que no me da miedo
sino que es mi deseo que no te quedes aquí
sufriendo añorándome llamándome
ensopado en unas lágrimas de fuego
con el miedo latente de no saber seguir sin mí…
y este si es mi último último deseo,
el más imposible
el más incomprendido
el más sincero…
si me voy que ya me voy
te quedarás en la nada confusa
en ese estado doliente ácido
te rasparán otros pañuelos que no serán el mío
otras caricias te sonarán falsas
otros abrazos te parecerán fríos
otras sonrisas mustias…
vente amor vente…
acompáñame en la muerte como en la vida
sáltate la promesa que te une a mí
hasta que la muerte nos separe
libérate de ese yugo rómpelo
pon tu corazón en la maleta
y el alma bien doblada
cierra la llave de paso del agua
y la puerta con doble vuelta
y vámonos juntos amor vámonos…
Francisco de Sales