Me siento puto. En vez de esperar o alimentar la gracia divina de la inspiración, la que me convierta en poeta, me adelanto, y sin título que me avale, esparzo palabras al azar, esperando que la casualidad sustituya a la…
La poesía me es infiel. A veces se escapa a no sé dónde y me deja en un estado de vacío y tristeza seca al que le faltan alas y lágrimas y colores. Se pasa varios días ausente, y yo,…
A veces, este lamentable quejilloso que escribe sus dislates amparados por adjetivos, alentando la contradicción, vaciando un inexistente pozo de lamentos y aventando quejas sin motivos, decide rendirse y no escribir más acerca del pesaroso tema. Entonces escribe/escribo: baterías de…
Si ser poeta es pavonearse cacareando una sarta de veleidades engarzadas sutilmente o un barullo de palabras inútiles pululando por ideas descabelladas que se unen una sola vez para decir aurora obsoleta o amor frío Si ser poeta es atreverse…
Si escribo es porque pretendo ser vocero de algunos que no hablan con palabras. Escucho a los árboles y luego narro sus diatribas. Los pájaros me dicen sus algarabías y sus amores. Me cuentan las piedras de sus noches duras…
Poética lujuria de versos henchidos con razón vanidosamente. Las palabras más selectas, que expresen en un cónclave sus maravillas. La imaginación, que sea exultante de bellezas gramaticales. “El amanecer se estrenó vanidoso…” “Las delicias ocuparon su presente…” “Boca sobre boca,…
A veces, cuando las palabras se encadenan voluntariamente en la poesía y surgen del milagro pensamientos atinados, frases de lujo, la voz auténtica del desamor, la historia inmejorable, la lágrima reprimida, el color atinado de un suspiro, el perfume inimitable…