Púdico rubor

Con tu pudor de virgen que encarna tus mejillas y te delata sin cuidado, tendrás que convivir, amigablemente. Con tu pudor de novicia, que convierte tu recato en grito, deberás conversar en tono amigo, y acordar una tregua, un compromiso,…

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Otra vez mi corazón y yo

Soy vocero de mi corazón, este que se deshace en llantos, este que gime late, ríe late. Soy quien escucha en su boca las palabras y la voz que no tiene. Soy su emisario en la tierra, quien desbrava sus…

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Miradas muertas en ojos callados

Del final de sus ojos partía una mirada que atravesaba un despoblado campo de sentimientos antes de llegar a mí. Aquella mirada, hermana caritativa de sus otras hermanas, antes pregonera amable de sentimientos y experta en comunicación, traía un regusto…

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Me saluda

A lo lejos, lejos en el tiempo, una sonrisa me saluda. Es una sonrisa que habitó en tu boca durante el tiempo que me miraste. Fue breve. Nos cruzamos una vez única, se clavó en mi recuerdo, me dejó la…

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Los llantos de mis lágrimas

Mis lágrimas alborotan, alegres, solicitando un recreo. Quieren lanzarse, juguetonas, por el tobogán de mis mejillas, quieren volar al suelo, disfrutar en la caída, diluirse en la vida. Mis lágrimas, tan tristes, tan cargadas de lamentos, quieren dejar la carga…

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Llorar

Llorar: para desaguar y desahogar el alma; llorar para saber que las emociones están vivas; llorar para lamentarse sin palabras, acusar sin palabras, maldecir sin decir; llorar para conmover al mundo, provocar tormentas, desenmascarar indiferencias; llorar para ser humano y…

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Latir… vivir…

El corazón sólo late en sus ratos desocupados. En los ratos importantes, ama. Este pluriempleo, estos nobles oficios, los desempeña de corazón y con todo su corazón. Latir de vida y latir de amor. Latir para vivir y latir para…

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