Todos mis caminos son vericuetos.
Están llenos de trampas
y ni tienen fin
ni conducen a Roma.
Todos mis caminos
me llevan a ningún lado,
me pierden intencionadamente,
o no tienen piedad para mí.
Todos mis caminos están rotos,
son impracticables;
son estrechos,
senderos angostos,
barrancos.
Todos mis caminos
me llevan a ti
y me alejan de ti.