Cuando quieras
que hablemos
de amor
avísame con tiempo
para que actualice mis recuerdos,
les quite el polvo,
piense en ti
y deje que las lágrimas fluyan
lentamente.
Cuando quieras
que hablemos de ti y de mí
tal vez ya será tarde.
El olvido se habrá tragado
todos los recuerdos,
la memoria me engañará,
la nostalgia me habrá invadido,
el desamor llenará mis estancias,
el dolor será mi dueño,
y tal vez la muerte
ya haya llamado a mi puerta.