Des

Desconcierto.

Un pensamiento se opone a otro

y otro encuentra en otro otro, un aliado.

No sé.

Podría pasarme el resto de mi vida diciendo no sé

y no mentiría.

Este desgobierno de mi cabeza

me aboca a este desconcierto sin remedio

que descontrola mis ideas

y me invita al descontento.

No sé.

Nunca sé.

Y, a veces, ni quiero saber.

Escaparme de la posible lucidez,

de la riqueza de mi intelecto,

es la opción más cobarde y placentera

que hoy conozco.

Francisco de Sales

Deja una respuesta