Oigo Tu risa Oigo tu voz Oigo tus confidencias Oigo tus palabras de amor. ¿Es así como suena el Cielo? Francisco de Sales

No hay música que te imite. No hay pájaros más libres que tú. No hay besos mejor besados. No hay ojos que brillen tanto. No hay Cielo salvo en tu Cielo. Eres única. Francisco de Sales

A la sombra de tu luz sin sombra me encuentro, perdido a la sombra de tu vida sin sombra me muero, esperándote como si la vida fueras tú solamente y nada más tuviera movimiento, o alma, o esencia... He viajado…

La añoranza saca brillo a tu recuerdo continuamente. Sufro un dolor moral en todo mi cuerpo. Sólo la medicina de tu presencia podría rescatarme de este purgatorio. Pensar que una distancia insalvable se interpone entre mis manos y tu cuerpo,…

Por verte venir alteraron su rumbo las estrellas y no se retiraron las mareas. Por verte llegar se entretuvo el invierno se contuvo el aire se detuvo el tiempo. Por verte de cerca y sentir tu presencia se adelantó el…

Tus besos aún vagan por el limbo de los que no han nacido, pero intuyen que se acerca el momento de conocer otros besos. Un terremoto dulce te recorre, con cuidado, despertando las emociones reprimidas, los abrazos desterrados, los deseos…

Todas las letras que he matrimoniado en mis escritos, nunca han conseguido decir más cosas, ni expresar mejor mis sentimientos, ni ser más agradables, ni más generosas, que cuando se han armonizado para escribir simplemente tu nombre. Francisco de Sales