Estuve muriendo toda la noche a manos de tus recuerdos torturadores. Ven. Coge tus reminiscencias y presencia, y vuelve a marcharte. Francisco de Sales
El desconsuelo estuvo buscando un poco de alegría en la papelera, y mendigando amor en una esquina, con la mano desenamorada suplicante, abierto el corazón, con unas monedas de amor de cebo para que alguien lo llenara, lo rebosara, lo…
En el destrozo de tu abandono, sabes que yo sin ti soy nada, encontré una luz tímida que me indicó la salida: tenía que olvidarte. Ahí creí encontrar la vida. Mi esfuerzo fue grande: a cada instante me recordaba que…
Nunca una palabra tuvo tanta vida en sus letras. Nunca. Nunca se recorrieron las esquinas del viento con tanta dedicación. Nunca. Nunca la luz fue menos, la inquietud más, la fe nada. Nunca. Nunca volviste a enamorarte, y este verso…
No fue fácil cerrar la puerta. Al otro lado, apenado o dolido, dejaba el pasado. En aquella casa aún se escondían nuestros secretos, aún escandaleaban risas, aún se estremecían algunos llantos. Al cerrar la puerta cerraba una etapa, aunque sólo…
Me sumo a los lamentos de mis lamentos para añadir otros nuevos... porque no tendré suficiente vida, ni suficientes lágrimas, ni hay tantos arrepentimientos como necesito. Cada vez que pienso en ti y en lo mal que te traté, lo…